El sagaz London recapturó en menos de 12 horas al intrépido Valderrey

Los sabuesos del Com/J Jackson London, no comieron catana y en menos de 12 horas recapturaron al intrépido Jesús Valderrey.

El “Chiche” de la película, se encerró por decimoquinta vez en el baño de su módulo en el Centro de Reclusión y Resguardo Policial Guasina, alegando dolor de estómago y desde allí, con una cabuya artesanal que fue confeccionando en los largos días de encierro, trepó al techo.

Eran las 2 am del sábado 12J y el intrépido corrió campo traviesa logrando traspasar uno de los 4 largos muros de la penitenciaría, oliendo la libertad. La misma cabuya que moneó para vulnerar las láminas del sanitario, la utilizó para descender al monte de las afueras y perderse en el rocío de la noche.

Sin embargo, más sagaces fueron London y sus muchachos, quienes en apenas medio día, ya lo tenían de vuelta en chirona.

Lo que jamás imaginó el “Chiche”, es que la persona que tocaría a su puerta en la comunidad La Floresta de San Rafael, no era el vacunador del Covid, el líder de calle, ni la electorera UBCH, era un tombo.

El casi bombero, en función de su aptitud descollante para trepar y escalar, logró correr y superar –sin pértiga, liana o escalera- el último obstáculo representado en el muro trasero de su casa, para encontrarse del otro lado con la resplandeciente jaula de Polidelta, con la encomienda de guiarlo en el incómodo retorno a su segundo hogar.

El intrépido “Chiche” estaba que egresaba, condenado por robo y porte de arma de fabricación casera (chopo), con el empujón de la cayapa libertaria que está cocinándose en anticipación del 21N, iba de tubo a la calle.

¿Cómo supieron que estaba en La Floresta?, Polidelta paró las orejas y radio bemba hizo el resto. Cuando esos dos se juntan, no fallan.

A Valderrey podrá estar reventándosele el estómago, pero dudamos que lo dejen ir baño. Nunca más.

¿Y el sagaz London? Durmiendo plácidamente.  

 

 

 

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